24 de febrero de 1994
Buenas tardes ya llegamos, hola mamá hola papá, Abuelito, Abuelito cuéntanos una de tus historia, venga acá mis niños, tomen asiento que les contaré una historia como nunca antes les han contado una, pero como una buena historia se empieza por el final siguiendo por el desenlace y terminando por el principio, pero puede que en esta historia haga excepciones para que puedan entender algunas partes de la misma, así que pongan mucha atención. Un día regresando de la universidad en una noche en la que se espera la lluvia, camina un joven llamado Dani, que mientras va caminando de regreso a su casa lleva melancolía, recuerdos perdidos, un sin fin de sentimientos encontrados, Dani el cual a la vista de las personas era normal, sabe el mas que nadie que no siempre fue así, mientras camina dice con un pensamiento de lamento, desearía tener lo que alguna vez tuve, el ser normal no es nada fácil, Dani siempre se preguntó que se sentiría ser normal y esa noche lo estaba viviendo y no era como es se lo imaginaba, mientras camina de regreso a su casa comienza la lluvia corriendo llega a la pestaña de una casa para poder cubrirse de la misma, medio mojado ve al cielo con una gran sonrisa falsa diciendo, si tan solo pudiera tenerlos nuevamente todo seria diferente, pasa el tiempo y la lluvia empieza a caer con menos fuerza así que Dani continúa su camino, mientras camina de regreso a su casa recuerda como fue que empezó todo y como aquel anochecer cambio su vida por completo.
Una pequeña historia...
Todo empieza un día en una anochecer cuando el tiene 5 años, jugando con unos niños cerca de su casa, pero Dani tenía un problema casualmente ese día, que era tener piojos. Manuel su mejor amigo era el único que lo sabía, pero Manuel por desgracia hace un comentario con respecto a ese problema así que todos se empiezan a burlar de el. Se podrían imaginar la tristeza de rechazo que le hacen a Dani en ese momento, en ese momento que todos lo señalan y se ríen de sale corriendo sin parar y se esconde llorando en un callejón obscuro detrás de unas flores cerca de la casa de una linda señora alta, blanca de ojos muy claros vestida como una señora de la época, la señora escucha los llantos del pobre niño afligido y melancólico y sale a ver que ocurre, cuando ella sale y observa entre la obscuridad de la calle, estaba aquel niño escondido detrás de una gran palmera con flores alrededor de ella, la señora se acerca a Dani y le pregunta, que ocurre hijo que te paso sentándose a su lado, Dani con los ojos llenos de lagrimas la ve y tomando un fuerte aliento le dice con una voz a medio salir, no se acerque tengo piojos, ella sonríe y lo abraza y le dice, eso no matara a nadie ni mucho menos a mi, sonriendo con su vestido azul le seca las lagrimas y sonándole la nariz le dice, conozco a tu familia hijo y se que eres un excelente niño y no tienes de que preocuparte, algún día desaparecerán esos carritos que están en tu cabeza.
Dani con una cara llena de alegría la ve diciendo eso cree, rápidamente le dice si hijo veras que si solo debes poner de tu parte, además se que llegaras a ser un excelente joven, del cual tus padres estarán muy orgullosos de ti, así que deja de llorar que los niños bonitos como tu no deben dejar que los niños malos ni las personas te hagan llorar ni mucho menos verte llorar, Dani sonriendo con una voz llena de emoción le dice. A esa linda señora que nunca mas lo verán llorar por nada del mundo, siempre mantendré una sonrisa pase lo que pase, levantándose rápidamente le da un abrazo a la señora y se va a su casa. La señora viendo mientras aquel niño regresa a su casa la señora susurra, eres la diferencia entre todos ellos y podrás ver más allá de tus ojos siempre y cuando lo desees, pero lo que aquel niño no sabia que esa noche cambiaría su vida para siempre.
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